Los bodegones son clásicos de la escena gastronómica porteña y en cada barrio de la Ciudad de Buenos Aires hay muchos para elegir.
Reconocidos por sus gigantescas porciones, son ideales para comer a buenos precios y en abundancia, sobre todo en épocas donde salir a comer afuera se volvió una experiencia casi de riesgo para el bolsillo. u origen se remonta a las antiguas pulperías, los primeros establecimientos de venta de bebidas y comidas de la Argentina del siglo XIX, y hoy son uno de los pilares de la oferta gastronómica en el país. A continuación, algunos imperdibles para probar el fin de semana en la Ciudad:
El Globo
El Globo es uno de los bodegones más característicos e históricos de Buenos Aires, abierto en 1908 en el barrio de Monserrat. Su extensa carta de platos caseros típicos de bodegones seduce a cualquier cliente que lo elija, y sin dudas los dejará con la panza llena.
Entre los destacados no falla el puchero de tres carnes: gallina, vaca y cerdo. De hecho, en sus primeros años de existencia, ese era el único plato que se servía en este restaurante. También destacan su famoso cochinillo, el matambre casero, el revuelto gramajo y los canelones de verdura.
El Globo queda en Av. Hipólito Yrigoyen 1199, Montserrat. Abre de lunes a domingo de 12 a 16 horas y de 20 a 01 horas.
Los Bohemios
Los Bohemios, el bodegón del Club Atlanta, se encuentra en pleno Villa Crespo y se ganó el título de uno de los mejores lugares para disfrutar de platos abundantes y sabrosos.
Y por su ubicación, a cuadras del Movistar Arena, es un muy elegido por la gente para comer antes o después de un recital.
Los Bohemios se encuentra en Humboldt 540, en el barrio de Villa Crespo. Abre todos los días de mediodía y noche, excepto los lunes, que trabaja solo de noche.
El Imparcial
Fundado en 1860, El Imparcial es considerado el restaurante más antiguo de Buenos Aires. Con más de 160 años, su carta es un homenaje a las raíces españolas y a los sabores clásicos porteños.
Entre sus platos más emblemáticos, las gambas al ajillo son un clásico irresistible, así como el chupín de pescado, con abadejo, merluza, lenguado y atún en un caldo con tomates, arvejas, morrones y papas españolas.
Otro gran imperdible es la milanesa de la casa, generosa y sabrosa, acompañada de panceta, queso fundido, jamón, morrón, huevo y papas fritas.
Se encuentra en Hipólito Yrigoyen 1201, en Montserrat. Abre de lunes a domingos de 12 a 16 horas y de 20 a 00:30 horas.
l Puentecito
El Puentecito es uno de los bodegones más antiguos de la Ciudad de Buenos Aires, con 150 años de historia siempre en el mismo local. Este restaurante clásico del barrio de Barracas sirve una milanesa napolitana enorme y otros platos típicos de la cocina porteña.
El menú cuenta con más de 100 platos donde se ofrecen entradas de parrilla, como mollejas, provoleta y chorizo, y algunas minutas como tortilla española. También sirven empanadas, fiambres, pescados, milanesas y carnes.
Queda en Luján 2101, Barracas. Abre de martes a domingo de 12 a 16hs y viernes y sábado 12 a 16 hs y de 20.30 a 00 hs.
