Florencia Díaz Philippi fue ganadora en su categoría en España y Gisela Suligoy terminó segunda en Perú.
Dos triatletas sanjuaninas tuvieron gran actuación en el Ironman, pero en diferentes ciudades. Florencia Díaz Philippi disputó el Ironman 70.3 de Valencia, España, mientras que Gisela Suligoy estuvo en el Ironman 70.3 de Lima, Perú, logrando ambas excelentes resultados.
Florencia Díaz Philippi
Flor venía de obtener un gran resultado en Campeonato Madrid Duatlón Media Distancia 2025, donde fue campeona absoluta en una competencia que no estaba en sus planes y apenas tres semanas antes del Ironman de Valencia.
Y fue en esa ciudad de España, el fin de semana pasado, donde Florencia coronó una gran actuación con el primer puesto en su categoría y fue séptima en la general, estableciendo un registro de 4h46m39s.
Florencia: “Ironman 70.3 de Valencia es una prueba que tuvo su segunda edición, pero que es un punto neurálgico, importante en Europa, por lo que hubo 3.000 triatletas y con mucho nivel europeo.
Yo me lo había preparado muy bien, era un objetivo A de este año, uno de mis objetivos A, que si bien estoy enfocada en la larga distancia que es a donde yo apunto, ocurre que como este año el mundial 70.3, es decir, de media distancia, se hace en noviembre en Marbella, aquí en España, y como yo vivo aquí, no me quería perder la oportunidad de ir.
Lo que encajaba era participar en esta prueba, aún a riesgo de que conseguir el slot (clasificación) fuese difícil, de hecho en mi grupo de edad, que es 45-49, solo había un slot, o sea que mi única chance era ganar; me preparé muy bien y llegué con muchas ganas.
La natación fue dentro de la marina, que si bien es aguas abiertas, la verdad que está como muy protegida, así que es una natación muy linda.
Tenía una parte de ciclismo rápida, pero con un puertito entre medio, un poco técnico, que a mí me gusta mucho, que yo disfruto, sin embargo ahí me falta un poco, entonces, por ahí pierdo un poquito más de tiempo de lo que me gustaría.
Fue todo muy parejo, toda la carrera en general me ha parecido que le he hecho bien, sostenido bien los ritmos, más o menos lo que he planificado, aunque me he quedado con ganas de más.
Ahora seguiré trabajando, así voy cada día intentando mejorar. Mi tiempo fue de Pero bueno, el resultado fueron 4 horas 46 y por suerte me alcanzó para ganar en mi grupo de edad, quedarme bien posicionada en la general y conseguir el ansiado slot para Marbella el 8 de noviembre de este año.
Ahora a seguir para adelante, lo próximo será un par de pruebas entre medio, ya pensando en Ironman Vitoria, a ver si puedo lograr la doble gesta de conseguir también slot al mundial de Kona, Hawaii, de larga distancia. Así que tendremos una sanjuanina a fin de año en Marbella de momento y ya veremos si en Kona también”.
Gisela Suligoy
Gisela estuvo en la capital de Perú, disputando el triatlón que se venía postergando desde 2018: “Esta carrera del medio Ironman de Perú, lo queríamos correr con mi pareja Miguel Giménez, desde el 2018, me parece que fue la primera edición. Y bueno, nunca se pudo dar hasta este año que terminamos de correr el medio de San Juan y ya estábamos entrenados, por lo que aprovechamos ese entrenamiento y nos fuimos a Lima. Generalmente en esta fecha corríamos en XTERRA, que este año no se hizo.
Habíamos leído que era una carrera bastante fácil, porque era todo en el borde del mar, que no era una zona montañosa, entonces era bastante fácil y el mar, de acuerdo a las fotos que vimos, era un mal calmo. Pero bueno, la verdad que no fue así, fue una carrera bastante dura.
Empezando con el mar, que al haber luna llena, estuvo bastante picado; con el solo hecho de decirte que estaban los guardavidas avisándote cuándo te podías meter debajo de la ola para poder ingresar al mar. Largamos a las seis y media de la mañana, entonces las boyas no se veían por la bruma y cuando llegabas a una boya, levantabas la cabeza y no veías la próxima.
Los que estaban que estaban en kayak o en moto de agua, te iban diciendo para dónde ir. La verdad que fue una aventura y en el medio, mil metros adentro, había corrientes, entonces la segunda boya, la tercera boya, no estaba a derecho, estaba inclinada, así que había que buscarla porque ellos se cercioraban de que pase por el lado izquierdo. Y la llegada del mar también era una aventura, porque cuando llegabas a la costa, venías con la ola. Si lograbas estar arriba de la ola, buenísimo, pero si te agarraban la espalda, te tiraba, como me pasó a mí; me agarró de espalda saliendo del mar y me tiró y me sacaron y me volvió a meter al mar.
Me sacaron los guardavidas. Era conmigo y era con todos así, pero lo bueno es que hice mi mejor tiempo en el mar, mejor tiempo que en San Juan. Tal vez haya sido la adrenalina que te generaba esto, la parte del mar me encantó.
La bici arranqué fuerte, como estoy acostumbrada en San Juan y no podía levantarla de 35 Km/h. Es un falso llano y con una subida de un paredón similar al de San Juan, pero que lo tenías que hacer tres veces, entonces era bastante pesado la parte de bici.
En el trote, es como que gasté mucho las piernas en la bici, entonces lo hice bastante lento. En San Juan me fue muy bien en el trote y este fue regular. Pensé que me había ido muy mal pero salí primera en el agua en mi categoría, terminé tercera en la bici y finalicé segunda. En el final del trote pensaba que estaba mal, pero en realidad estaban todos mal o todos estaban sufriendo de la misma manera.
Nos encantó todo, es un tría que hay que prepararlo bien. Nos hemos encontrado con gente hermosa en Lima, siempre haciendo amigos triatletas, siempre encontrándonos con algunos triatletas amigos las carreras. La gente de Lima, la gente de Perú, muy generosa, muy abierta.
Tuvimos un problema con el fusible de mi bicicleta cuando llegamos. Estaba roto porque en el aeropuerto tiran las valijas así nomás y los chicos de una bicicletería lo empezaron a armar porque no existe ese repuesto de Cervello en Lima. Así que nos vamos muy contentos y por ahora acá termina la temporada de triatlón, ya vamos a ver con qué seguimos”, comentó Gisela desde Lima.
